
''Siento mucho jugar Copa Davis. Tengo una alegría inmensa, es algo muy emocionante y, si hubiera perdido, hubiera sido un dolor terrible. Yo vivo así la
Copa Davis'', explica el ''Vampiro''.
Foto: El Mercurio.
SANTIAGO.- "Cuando jugué con Dominic Hrvati, que era 19 del mundo y número uno de Eslovaquia, le gané, cuando jugué contra el número uno de Australia, le gané, ahora jugué contra el número uno de Austria y le gané". El recuento lo hace Nicolás Massú, durante la conferencia de prensa ofrecida tras darle el 1-0 a Chile.
El viñamarino está contento y muy satisfecho de comenzar la coronación de un trabajo largo, orientado a ganar esta serie ante Austria y volver al Grupo Mundial de Copa Davis.
Siento mucho jugar Copa Davis. Tengo una alegría inmensa, es algo muy emocionante y, si hubiera perdido, hubiera sido un dolor terrible. Yo vivo así la Copa Davis.
"Jugué cuatro horas y físicamente estaba impecable, para eso hay que tener un trabajo detrás. Ese trabajo ha sido silencioso, con muchas derrotas, muchas frustraciones en los últimos dos años, pero he seguido", dijo Massú.
"Derepente no es tanto el cansancio físico, sino el cansancio de la presión, pero yo tengo como veintitantas Copa Davis, entonces la experiencia ayuda y lo que más me pone contento es que cuando tuve que cerrar el partido lo cerré bien, había nerviosismo, pero lo cerré bien.", completó el "Vampiro", que hoy, una vez más, dio muestras de su gran amor por la camiseta ganando como siempre: con unas garras inmensas.
La raqueta número tres de Chile, y actual número dos del duelo ante los europeos, reconoce que su triunfo es un punto muy importante para el conjunto nacional, pero le pone paños fríos a las ansias.
"Este es un golpe fuerte para ellos y para mi ánimo también es bueno, para cuando me toque entrar a la cancha mañana y el domingo (...) Hay que tener claro que no se ha ganado, lo que sí es un golpe anímico muy importante para nosotros, pero quedan dos puntos", señaló.
Massú también tuvo palabras para hablar del dobles que mañana deberá afrontar junto a Paul Capdeville, primer singlista de este desafío.
"Con Paul hemos jugado una sola vez y lo hicimos muy bien. Esto es relativo, las Olimpíadas las ganaron Federer con Wawrinka que nunca juegan juntos y le terminaron ganando a parejas que juegan durante todo el año", analizó.
"Yo conozco a Paul, él me conoce a mí y vamos a tratar de salir adelante. Estamos en Chile y vamos a tratar de ganar", sentenció Nico.